sábado, 5 de febrero de 2011

Detectan la presencia del pulgón del nogal en plantaciones de Argentina



Si bien la producción de nueces en Mendoza no es una actividad de gran relevancia sobre todo comparada con otros frutales, existen áreas dentro de la provincia en las que el cultivo del nogal adquiere mayor importancia. Esto ocurre principalmente en la zona del Valle de Uco. 

Se trata de un cultivo del cual se conocen relativamente pocas plagas animales. Es la Carpocapsa, la misma polilla que ataca a las frutas de pepita como peras, manzanas y membrillos, la principal plaga del nogal en nuestro país y la única que ha justificado tratamientos sanitarios.
 
A principios del otoño de 2010, concretamente en el mes de abril, el INTA Mendoza encontró en plantas de nogales de vivero unos pequeños insectos colonizando el envés de las hojas. 

El estudio de los mismos permitió determinar que se trata del “pulgón del nogal” conocido científicamente como Chromaphis juglandicola. Simultáneamente, se recibieron muestras de pulgones para su análisis, provenientes de Neuquén y de Río Negro tomadas algunas de ellas a finales de 2009 sobre nogales. La especie resultó ser la misma encontrada en Mendoza. 

También en Chile 

El Ing. Agr. MSc. Jaime Ortego, de INTA EEA Mendoza, señala que el pulgón del nogal es un pequeño pulgón que se encuentra generalmente en bajo número colonizando el envés de los foliolos de los nogales alimentándose de su savia generalmente junto a las nervaduras. Es de color amarillo más o menos intenso y casi siempre presenta pequeñas manchitas negras de a pares en el dorso del abdomen. 

Este insecto es originario de Europa y se ha encontrado también en India, Pakistán, China y América del Norte. El profesional revela que “un tiempo antes de verificarse su presencia en Mendoza, se lo detectó en el vecino país de Chile, concretamente en la comuna de Los Andes de la V Región” por lo que “este hallazgo podría hacer suponer que ha ingresado a la Argentina desde Chile o bien que se produjo una introducción simultánea a ambos países”. 

Cabe señalar, que la presencia en la Argentina de este insecto fue informada al SENASA al momento de su deteccción. 

Aún no se ven daños 

Ortego apunta que “el hallazgo en otoño de machos y hembras ovíparas (que colocan huevos), demuestra que pasan el invierno al estado de huevo”. Esto ocurre en las yemas de las ramitas por lo que las plantas de vivero pueden ser una importante forma de dispersión de la plaga. 

“También podría ser ésta la forma como entró en nuestro país –especula-; o bien a través de la introducción de yemas para injertar desde Europa o EE UU donde el pulgón se encuentra ampliamente difundido”. 

El profesional admite que “no se conoce todavía la distribución territorial de este pulgón en la Argentina, salvo lo mencionado para Mendoza, Neuquén y Río Negro. En los lugares donde se lo ha detectado no se encontraron grandes poblaciones y no se han observado daños de consideración en la presente temporada que hagan prever la necesidad de tratamientos. 

La literatura consultada menciona daños provocados principalmente por caída de las hojas y manchado de los frutos a través del crecimiento de fumaginas (hongos saprófitos) sobre la melaza que produce el pulgón en caso de ataques intensos. 

De todas maneras se trata de una plaga que se encuentra en observación y se estudia su comportamiento, dispersión y posibles daños de manera de tomar en forma oportuna todas las medidas que sea necesario para evitar o minimizar sus efectos.


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