martes, 2 de agosto de 2011

FAO advierte sobre precios de maíz en la región

La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) advirtió de los efectos del encarecimiento del maíz.

“Preocupan los impactos que está teniendo el aumento de los precios del maíz blanco en la seguridad alimentaria de los

países de Centroamérica y México”, reveló la institución. El aumento de los precios de maíz blanco ha influido en que los índices de inflación de alimentos hayan continuado elevándose.

Entre junio de 2010 y junio de 2011, el precio mayorista de maíz blanco y de la tortilla en México aumentó 65% y 25%, respectivamente. En ese mismo período el precio mayorista del maíz blanco aumentó 56% en Guatemala y 112% en El Salvador. En Guatemala el precio de la tortilla aumentó 33% entre marzo 2010 y marzo 2011.

Sin embargo, durante la última semana de julio, el quintal de maíz en El Salvador bajó a un promedio de $30, es decir, $5 menos que los meses anteriores.

Es durante julio y agosto que salen los primeros quintales de la nueva cosecha nacional. Para este año podrían cultivarse unos 19 millones de quintales de maíz, lo que representa un incremento del 12% sobre la cosecha de 2010.
Advierten rebrote de plaga

Los cultivos de maíz que están madurando en las laderas enfrentan la amenaza de un hongo conocido como “mancha de asfalto”, aunque no se habla de pérdidas.

Óscar Figueroa, director ejecutivo de la Asociación de Proveedores Agrícolas (APA), explicó que en Ahuachapán, Atiquizaya, Zapotitán y en el norte de Santa Ana podrían observarse pérdidas equivalentes al 5% de lo que se está cosechando en el país –es decir, alrededor de 900,000 quintales– debido a la intensidad con la que se ha propagado la “mancha de asfalto”. Este hongo, cuyo nombre científico es Phyllachora, limita la capacidad de la planta para aprovechar la luz del sol y respirar.

Figueroa agregó: “No tenemos plantas resistentes, ni siquiera el híbrido nacional”, refiriéndose a la semilla que se ocupó este año para la cosecha.

Por su parte Mario Parada, director de investigaciones del Centro Nacional de Tecnología Agrícola y Forestal (CENTA), explicó que sí se observan algunos casos de plantas contagiadas, pero que “no hay pérdidas grandes que se nos hayan reportado”.

El funcionario de CENTA recordó que el problema puede volverse grave si hubo siembra tardía. Si el agricultor comenzó su tarea desde el 15 de junio, es más vulnerable a daños profundos por la plaga en cuestión. Muchos agricultores de occidente ya habían comenzado desde finales de mayo con sus labores agrícolas, por lo que las mazorcas afectadas ya tenían un elote bastante desarrollado, que no fue afectado por el Phyllachora. Eso está listo para consumirse”, detalló Parada


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