Textos: Guillermo Koster
Fotos: Germán Pomar
Los precios, el clima, las plagas, la variedad implantada, el sistema de recolección y la comercialización, entre otras vicisitudes, atentaron permanentemente contra la rentabilidad del productor algodonero. Esta inestabilidad, que afectó la competitividad de la cadena agroindustrial, propició la necesidad de los chacareros de obtener mayores beneficios, buscando el apoyo en técnicos especializados en la materia, tanto del ámbito privado como estatal.
Así, la presencia del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) intenta contribuir a la temática con claridad, aportando nuevas técnicas y maquinarias para el desarrollo de tecnologías de manejo del cultivo, mejora de la calidad y herramientas económicas para aumentar la aptitud y sustentabilidad del sistema algodonero.
Una de las discusiones, en la cual el ente oficial aporta resultados científicos, tiene que ver con la calidad de la fibra cosechada mecánicamente, desde la irrupción del surco estrecho. Con la puesta en marcha de un plan piloto y los primeros resultados a la vista, ciertos mitos algodoneros comienzan a derrumbarse. El más trascendente en esta etapa de investigación, que propició permanentes discusiones entre productores y empresarios a la hora de comercializar el producto, comienza a ver algo de luz al final del túnel. El referido, tiene que ver justamente con el método de cosecha mecanizada utilizado en algodonales de alta densidad. La cuestión era si el sistema picker o stripper afectaba más o menos al rendimiento y a la calidad del textil a la hora de ser cosechado para ser llevado a las desmotadoras. En consecuencia, el precio que percibía el productor variaba considerablemente si era recolectado por uno u otro sistema.
Plan piloto
El establecimiento agrícola-ganadero-forestal “Don Panos” de la empresa Unitec Agro, sobre ruta provincial 3 en jurisdicción de Presidencia Roca, fue escenario de una discusión entre profesionales, funcionarios y productores sobre los aspectos relacionados a la cosecha, la calidad de la fibra y su impacto en los precios del mercado. Para esto, se evaluó el efecto de equipos de cosecha de algodón sobre la calidad de la fibra en cultivos de alta densidad, se escuchó la experiencia aplicada por el mega emporio algodonero que produce el 83 por ciento del textil bajo riego artificial y se observó el trabajo de los distintos tipos de cosechadoras mecánicas, evaluando las pérdidas, las impurezas y el mayor porcentaje de rendimiento al desmote.
La iniciativa fue organizada por el INTA Regional, junto al dueño de casa y el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación (MAGyP), oportunidad en la que participaron unas 130 personas de las provincias de Santa Fe, Formosa, Corrientes, Santiago del Estero y el Chaco, todas integrantes de la gran cadena algodonera. Estuvieron presentes referentes del sector público y privado de la cadena agroindustrial, productores, cooperativas desmotadoras, hilanderías, comercializadores, representantes de los Ministerios de las provincias algodoneras y profesionales, entre otros. Se destacaron las explicaciones del director regional del INTA Chaco-Formosa, Eduardo Delssín; de Juan Arenaza y Walter Reichert, por Unitec Agro; y de Lucrecia Santinoni, representante del Ministerio de Agricultura de la Nación.
Máquinas en acción
Bajo un sol de otoño ideal, se pudo observar el trabajo a campo de cinco cosechadoras de algodón en círculos de 100 hectáreas cada uno, en un lote de unas 870 hectáreas. Una cosechadora con el sistema picker y cuatro con stripper, recibieron a los participantes tras recorrer varios kilómetros por rutas pavimentadas y polvorientos caminos. Algodonales de 1,05 metros de promedio de altura, a 38 centímetros, con 13 plantas por metro y cinco capullos, formaron parte del escenario para el trabajo de las maquinarias. A saber: Una John Deere con sistema picker y cuatro stripper, todas con pre-limpieza (Auros-Sáenz Peña, Wouchuk-Las Breñas, Argento-Villa Ángela y Javiyú-Inta-Dolbi).
La necesidad de los productores de obtener mayores beneficios llevó a los técnicos del INTA a trabajar en un sistema productivo basado en el estrechamiento de la distancia entre surcos y al aumento de la densidad de plantas que recibió el nombre de surco estrecho o ultraestrecho. Este sistema obligó a desarrollar nuevas tecnologías, adaptar otras que se conocían para surcos convencionales y a validar los pequeños logros que se iban consiguiendo en cada temática por separado.
El innovador surco estrecho
El cultivo en surcos estrechos propició el desarrollo de un sistema de cosecha que permite la recolección del algodón de una sola pasada y en adecuadas condiciones de limpieza. En todos estos campos, se han logrado avances significativos en los últimos años. Tradicionalmente, en Argentina la cosecha mecanizada de algodón se desarrolló en base al principio de “arrollar” la fibra de las capsulas mediante un husillo rotativo montado en tambores giratorios, denominado picker. Con la aparición del sistema de cultivo de surcos estrechos, se produjo la irrupción del sistema de cosecha bajo el principio de “arrancar” la cápsula con la fibra, mediante plataformas con puntones, conocido como stripper.
La necesidad de aportar información objetiva con respaldo metodológico sólido llevó a que, dentro del marco del convenio MAGyP INTA referido al programa de Asistencia para el Mejoramiento de la Calidad de Fibra de Algodón (PROCALGODON), se inicie desde INTA investigaciones sobre el tema. “La industria prefiere el algodón de husillos (picker), por sobre el stripper”, fue el comentario realizado a NORTE Rural por Denis Byttebier y José Luis Romero, ambos presentes en el encuentro representando a la Hilandería TN Platex, ubicada en Puerto Tirol. En esta misma línea, destaca el corredor de fibra de algodón, Eduardo Mosa: “El surco estrecho con picker es el futuro del algodón para la industria argentina. Para el futuro del productor es más eficiente y abarata los costos del sistema”.
Sin embargo, los estudios realizados por el INTA concluyen que el parámetro “uniformidad de fibra” no fue afectado por los tratamientos, a pesar de la variabilidad observada entre los diferentes equipos, todos ellos presentaron fibra de igual clasificación (“baja uniformidad”). En los restantes parámetros evaluados, como micronaire, longitud y elongación, si bien se encontraron diferencias entre los tratamientos a nivel de significancia estadística en algunas de las características tecnológicas evaluadas, las mismas no hacen cambiar la calidad de la fibra obtenida, desde el punto de vista de la comercialización.
Además, se estableció que las pérdidas en el momento de la cosecha no fueron diferentes, a nivel de significancia estadística, en los distintos tratamientos evaluados. El sistema de cosecha picker produce algodón con menor porcentaje de impurezas y mayor rendimiento al desmote respecto de los equipos stripper evaluados; mientras que el promedio de rendimiento de fibra de los sistemas de stripper con pre-limpieza fue del 29 por ciento.
Las tareas a campo, ante la presencia de todos los representantes de la cadena algodonera, así lo confirman: 5.660 kilos de algodón en bruto de la variedad NuOpal, casi 1.780 kilos de fibra obtenida, un rendimiento del 34 por ciento, con 40 kilos de pérdida de textil caído en el campo, sembrado el 10 de noviembre de 2011 con 280 milímetros de lluvia y 185 mm de riego artificial, ratifican la investigación. “El objetivo es llegar a las dos toneladas de fibra por hectárea”, apuntó Reichert.
“La mitología se la combate con investigación. Si queremos trabajar en gestión de la cadena algodonera, hay que tener actitud y seriedad para avanzar. El INTA no recomienda cosecha stripper sin pre-limpieza, salvo que se haga un excelente manejo del lote”, concluyó Delssín. La ingeniara Diana Piedra, del INTA Colonia Benítez aporta lo suyo: “Los parámetros tecnológicos se mantienen dentro del rango óptimo para la comercialización”.
Los trabajos realizados no agotan las investigaciones, ya que sólo considera un estado dado del cultivo cosechado, momento de cosecha, pero sí permite dilucidar la incidencia de los sistemas de cosecha picker y stripper disponibles en el país, en la calidad de la fibra cosechada, considerando diferentes parámetros tecnológicos de características netamente objetivas. Es que según el ente oficial- el sistema de cosecha no afecta a la calidad ni al rinde del algodón. El manejo del cultivo en sus distintas etapas, parece ser la clave.
FUENTE: http://www.diarionorte.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario