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Los engordadores de ganado bovino de la República Mexicana hicieron un llamado a las autoridades mexicanas para que liberen los apoyos necesarios, con el fin de que el mercado de la carne de res no se venga abajo, dijo en conferencia de prensa Álvaro Ley, presidente de la Asociación Mexicana de Engordadores de Ganado (AMEG).
Sostuvo que la situación aún no es crítica, pero “de no hacer nada podría cambiar el panorama rápidamente”.
Advirtió que los granos básicos utilizados para el forraje con el que se alimentan las cabezas de ganado, como son “el maíz, trigo y sorgo, se incrementaron en sólo cinco meses 65.26%, de diciembre de 2010 a abril de 2011”.
Al hacer un comparativo de ingresos contra costos de finalización del ganado, tenemos una pérdida de 442 pesos por cabeza”, precisó el ganadero.
Álvaro Ley asegura que han podido mantener los precios al consumidor porque la carne que actualmente se vende en carnicerías, mercados y supermercados, proviene de cabezas de ganado alimentadas “con los últimos inventarios de forraje almacenados”.
Pero advirtió que se están agotando con mucha rapidez, y al mes de mayo, 80% de los productores ya no tendrán nada en sus inventarios y se verán obligados a incrementar los precios de la carne.
Actualmente el precio de carne en canal es de 38 pesos el kilogramo, pero de no compensar al mercado con apoyos llegará a 41 pesos por kilo a finales del año.
Según estimaciones de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) habrá una pérdida de un millón y medio de toneladas de granos.
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