El primero en hablar en la inauguración oficial fue el presidente del comité organizador, el Centro de Tradiciones Gaúchas Indio José, Luis Ribeiro, reclamando al gobierno nacional por la falta de garantías jurídicas. Afirmó que la Expo Santa Rita “constituye el mejor ejemplo de que se puede progresar en el Paraguay honestamente, pese a que la inseguridad, tanto física como jurídica, pone en jaque a los que trabajan e invierten en el país”.
El siguiente en hablar fue el intendente de Santa Rita, Concepción Rodríguez, quien despotricó con dureza contra el gobierno afirmando que toda una ciudad y una de las regiones más productivas del país viven en zozobra por culpa de un grupo de inescrupulosos, que adquieren títulos falsos que están siendo rematados por el Banco Central del Paraguay, para luego, con la complicidad de jueces inescrupulosos, reclamar la posesión de tierras que están en poder de colonos brasiguayos desde hace décadas.
“No podemos permitir que una rosca corrupta, amparada por el poder político y con influencia sobre la Policía y el Poder Judicial, venga y destruya todo lo que se ha construido en Santa Rita. Vamos a defender el Estado de Derecho y la propiedad privada hasta las últimas consecuencias. Estos delincuentes reclaman incluso el predio del parque industrial y tecnológico de la Municipalidad de Santa Rita, lo que da una idea de la gravedad de este tema”, sentenció el jefe comunal.
Otro que no ahorró críticas al gobierno de Fernando Lugo fue Juan Néstor Núñez, titular de la Asociación Rural del Paraguay. Aseguró que “nadie paga tantos impuestos como el sector de la producción agroganadera” y se preguntó por el destino de estos pagos.
“Dónde están los impuestos que pagamos. Dónde están las inversiones del gobierno? Cada día se roba más y más, este pareciera ser el país de la eterna corrupción”, lamentó Núñez.
Finalmente habló el ministro de Agricultura y Ganadería, Enzo Cardozo intentando destacar algunos logros de su gestión y del gobierno. Señaló el funcionamiento de la Escuela Agrícola del Km 30, Minga Guazú aunque se olvidó de mencionar que la escuela funciona en condiciones muy precarias y además es acosada permanentemente por supuestos sin tierras, que incluso en una oportunidad reciente quemaron parte de la producción sojera de la institución educativa.
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